Quemas e incendios en Argentina

Impresionan las imágenes satelitales del sistema FIRMS de la NASA, que muestran los focos de incendios en gran parte de Argentina. Se aprecian focos activos en una gran porción del norte de Argentina, y llama la atención la cantidad que hay a lo largo del valle aluvial del Río Paraná y en su delta, en las provincias de Santiago del Estero, Chaco, Formosa, Corrientes, norte de Santa Fé, y los focos en el valle de Punilla, Córdoba.

Imagen del Fire Information for Resource Management System (FIRMS) de la NASA

FIRMS fue desarrollado por la Universidad de Maryland, con fondos del Programa de Ciencias Aplicadas de la NASA y la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, para proporcionar ubicaciones de incendios activos casi en tiempo real a los administradores de recursos naturales que enfrentan desafíos para obtener información oportuna sobre incendios derivada de satélites.

Captura de pantalla del sistema de visualización del Servicio de mapas web (WMS) de la NASA

La NASA informa en su website que los mapas (imágenes) basados en incendios de FIRMS se ofrecen a través del Servicio de mapas web (WMS) y WMS con soporte de tiempo (WMS-Time), con proyecciones admitidas en datos de Lat-long (EPSG: 4326) y proyección Web Mercator (EPSG: 3857 o 900913).

Lamentablemente la sequía colabora con la idiotez de quienes inician muchos de esos fuegos que se suman a las áreas importantes que actualmente se están quemando en el mundo y que afectan negativamente el clima incentivando el cambio climático.

Es una importante problemática global la creciente intensidad de los incendios forestales y la degradación de los bosques. Argentina es el segundo país del mundo que mayor superficie de bosques perdidos a partir de 1982, sólo superada por Brasil y seguida por Paraguay, de acuerdo con estudios publicados.

Recientemente se conoció que el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, en el marco del Centro de Información Ambiental (CIAM), elaboró un informe donde estima que entre 1998 y 2018 se perdieron en total 6,5 millones de hectáreas de bosques nativos, de los cuales, 2,8 millones ocurrieron entre 2008 y 2018.

El 87% de la pérdida de dichos bosques corresponde a la región del parque chaqueño, principalmente Santiago del Estero (28%), Salta (21%), Chaco (14%) y Formosa (13%). El área constituye el segundo foco de deforestación de Sudamérica después del Amazonas.

En Argentina, entre 2008 y 2018, 47,2% de la deforestación (845.832 ha.) correspondió a desmontes autorizados dentro de la categoría III (verde). El 52,8% (946.769 ha) se produjo en las categorías I (rojo) y II (amarillo), es decir en áreas que la ley prohíbe. Además, se perdieron 983.467 ha en bosques no incorporados en los ordenamientos provinciales.

Las causas de la deforestación, las principales, son la expansión y la diversificación agropecuaria, en especial la agricultura y la ganadería intensivas.

Los incendios en la zona del delta del río Paraná, en el litoral de Argentina, están provocando una crisis ambiental y sanitaria en las grandes urbes cercanas. El humo y las cenizas han provocado un importante aumento de afecciones respiratorias en personas susceptibles y alérgicas, todo en un escenario complicado por la pandemia del SARS-CoV-2.

Los incendios ocasionan la pérdida de capacidades de uso a los suelos y esto genera una pérdida económica acumulativa. Un artículo, publicado en la revista Science of the Total Environment confirma que a corto plazo las medidas de restauración no logran la recuperación de la composición original del suelo, solo puede lograrse a largo plazo.

El suelo es un componente no renovable de la biosfera que es clave para la productividad y sostenibilidad de los ecosistemas terrestres. Los daños que provoca un incendio forestal y las quemas sucesivas son profundos, y la restauración de los ecosistemas asociados, enormemente compleja.

En los suelos quemados se ha destruido gran parte de la lignina, un componente mayoritario de los tejidos de las plantas que está presente especialmente en las paredes celulares de la madera. Los suelos quemados son más resistentes frente a la actividad biológica, retrasando los procesos microbianos requeridos para la restauración el suelo.

Es sabido que cuidar el suelo es una acción imprescindible en éste país, buena parte de los ingresos dependen de éste recurso, cuya importancia es vital para la producción agropecuaria, industrias y cadenas asociadas.

Globalmente, en el mundo productivo se entiende que "la productividad del suelo debe ocupar un lugar cada vez más prominente en el pensamiento de los pueblos y de sus conductores. Como fuente de alimentos para toda la humanidad debe ser objeto de la consideración inteligente y permanente que merece una riqueza tan indispensable".-

Post relacionado:

• Sobre la importancia del suelo en el futuro de la humanidad. 25/08/2020.-

___________________

NOTA: Las cookies de este sitio se usan para personalizar el contenido y los anuncios, para ofrecer funciones de medios sociales y para analizar el tráfico. Además, compartimos información sobre el uso que haga del sitio web con nuestros partners de medios sociales, de publicidad y de análisis web. Ver detalles.

IMPORTANTE: Todas las publicaciones son sin fines comerciales ni económicos. Todos los textos de mi autoría tienen ©todos los derechos reservados. Los contenidos en los link (vínculos) de las notas replicadas (reproducidas) y/o citadas son de exclusiva responsabilidad de sus autores. Éste blog ni su autor tienen responsabilidad alguna por contenidos ajenos.