Tal como lo señalaron la mayoría de los expertos analistas que no
esperaban que la organización colapse, con la muerte de Yahya
Sinwar, la organización terrorista sigue asestando duros golpes al
Ejército israelí.
Las tácticas guerrilleras de Hamás en el norte de Gaza complican su derrota
Israel ha diezmado el ala militar de Hamás, junto con gran parte de Gaza.
Sin embargo, la estrategia de asalto y huida a pequeña escala del grupo
supone una amenaza en el norte del enclave.
Por Patrick Kingsley y Aaron Boxerman, publicado por The New York Times.
La mayoría de los altos mandos de Hamás han muerto. Las bases del grupo
han sido diezmadas. Muchos de sus escondites y arsenales han sido
capturados y destruidos.
Pero el asesinato de un coronel israelí cometido por Hamás en el norte de
Gaza el domingo reveló cómo el ala militar del grupo, aunque no tiene la
capacidad de operar como un ejército convencional, sigue siendo una
poderosa fuerza guerrillera con suficientes combatientes y municiones para
complicar al ejército israelí en una guerra lenta, agotadora y aún
imposible de ganar.
El coronel Ehsan Daksa, miembro de la minoría árabe drusa de Israel,
murió al estallar un explosivo colocado cerca de su convoy de tanques.
Fue un ataque sorpresa que ejemplificó la manera en que Hamás ha
resistido casi un año desde que Israel invadió Gaza a finales de octubre
pasado, y probablemente podrá hacerlo incluso después de la muerte de su
líder, Yahya Sinwar, la semana pasada.
Los combatientes de Hamás que quedan se ocultan en edificios en ruinas y
en la vasta red de túneles del grupo, gran parte de la cual permanece
intacta a pesar de los esfuerzos de Israel por destruirla, según
analistas militares y soldados israelíes.
Tanques israelíes camino al norte de la Franja de Gaza Foto de Abir Sultan/EPA, vía Shutterstock. Visto en The New York Times |
Aunque Hamás no puede derrotar a Israel en una batalla frontal, su
enfoque a pequeña escala, de golpear y huir, le ha permitido seguir
infligiendo daño a Israel y evitar la derrota, aunque, según el recuento
no verificado de Israel, Hamás haya perdido más de 17.000 combatientes
desde el comienzo de la guerra.
“Las fuerzas guerrilleras están trabajando bien y será muy difícil
someterlas, no solo a corto plazo, sino a largo plazo”, dijo Salah
al-Din al-Awawdeh, miembro de Hamás y excombatiente del ala militar del
grupo, quien ahora es analista en Estambul.
Aunque Israel haya destruido los depósitos de cohetes de largo alcance
de Hamás, dijo al-Awawdeh, “sigue habiendo infinidad de artefactos
explosivos y armas ligeras a la mano”.