Corren tiempos en que las noticias y los comentarios sobre los problemas por venir por causa de la ya tan mentada crisis financiera, a muchos ya agobia porque por el momento todo pronóstico es oscuro, no porque exista una tendencia a "andar asustando a la gente"; pero el hecho es que ninguno se quiere quedar sin saber que va a pasar, en general a todos les interesa tratar de alguna manera las noticias y los diagnósticos por más negativos que sean.
Aunque no parezca, son de interés especial los anuncios gubernamentales y sus resultados en el tiempo, y eso es una buena señal. La sociedad le pedirá con mayor énfasis respuestas válidas a sus dirigentes y estos tendrán que mejorar su respuesta con hechos favorables porque entienden que el horno no está para boyos.
Otra buena señal es que en el medio de tantos problemas se ven las grandes actitudes. Mucha gente que se ha quedado o se está quedando sin trabajo saca a relucir sus capacidades e inicia emprendimientos personales o encara formas de asociativismo para mantenerse o emprender nuevos negocios, demostrando una capacidad de adaptación, en gran medida, producto de una actitud positiva y proactiva, seguramente asociada al instinto que hicimos referencia.
La frase "no está muerto quien pelea", en tiempos de crisis se la menciona más seguido.
