Una nota en la línea de la que venimos señalando en relación a las de erosión eólica y degradación de los suelos.
Aunque me satisface de alguna manera leer la noticia, sobre todo el anuncio que hacen sobre la continuidad de estos operativos, no voy a felicitar a las autoridades, porque sólo están cumpliendo con su responsabilidad. Lo que si quiero señalar, es que me gustaría ver, como a todos los que estamos preocupados por nuestro medio ambiente, que estos procedimientos sean una constante en el tiempo.
Cualquiera que ande, desde hace mucho, por los caminos de la Provincia y tenga un poco de memoria, coincidirá conmigo que hay lugares que en los años del veranito económico, que nos dio el alza de la commodities, se talaron todos los montes. Se pueden ver leguas de campo abierto, cuando estaban cubiertos de cultivos, uno medio que se alegraba.
Desde hace un par de años, debido a la seca, muchos de esos campos no se están trabajando, y ahora en ellos sólo se ven los huayramuyoj(*) bailando (viento del diablo en quechua). Lo que deja en evidencia que en esos muchos lugares no se respetó la Ley 6.841 de Conservación y Uso Múltiple de las Áreas Forestales.
(*) Aclaro que la foto del huayramuyoj es un ejemplo que ignoro de donde es. Hago esa referencia para quien nunca ha visto un torbellino de tierra. Se suelen dar en áreas con suelos desnudos y secos.
Estas cosas me destrozan...aqui en el chaco de Paraguay, la gente coloca cadenas entre 2 tractores y asi van echando de raiz los árboles...principalmente son menonitas que viven en la zona. Los torbellinos de arena son insoportables en muchos pueblos cuando por 4 dias seguidos arrecia un viento de mas de 50 km/h.
ResponderBorrarMe gusta esta blog Jorge..muy buena iniciativa...
saludos!
Karina Diarte
Gracias por tu comentario Karina. Te comento que conozco parte de las colonias menonitas, y no sólo los menonitas están desmontando.
ResponderBorrarEl tema de las cadenas también se usa por aquí.
Al tratar el tema del desmonte, hay que apuntar a las acciones que se realizan violando toda norma de conservación, aquellas que tienen el sólo fin de la explotación y extracción sin consideración de sustentabilidad.
Hay productores que realizan un meticuloso análisis de impacto de medio ambiente, respetan las reservas, dejan franjas e isletas de monte y realizan un sistema productivo sustentable, cuidando el recurso suelo. Tenemos que tener cuidado de no ponerlos a todo en la misma bolsa.