Este viernes se conmemora el 91° aniversario de la victoria de la Batalla
de Boquerón, en la Guerra del Chaco, entre Bolivia y Paraguay. Un día
importante en la historia de la Guerra del Chaco (1932-1935) y la historia
del Paraguay.
El 29 de septiembre es feriado nacional en Paraguay en recordación de la
batalla de Boquerón, por ser la primera acción bélica de la guerra del Chaco
e inicio de la recuperación del Chaco Boreal y expulsión del ejército
invasor.
Croquis del Fortín Boqueron. Visto en zona-militar.com |
El 29 de septiembre de 1932 tras días de duros combates en un ambiente
hostil desde muchos puntos de vista, el ejercito paraguayo logra la victoria
de la batalla. Victoria que fue decisiva para marcar el rumbo del conflicto
bélico con Bolivia y la defensa de la integridad territorial del
Paraguay.
La Batalla de Boquerón se inicia tras una serie de acciones y conflictos
diplomáticos y militares que dan inicio a la Guerra del Chaco. El 5 de
julio la delegación paraguaya se retiró de la conferencia en Washington
debido al "incalificable" ataque boliviano al fortín Carlos Antonio López
en Pitiantuta. Este ataque se realizó el 15 de junio mientras, a pedido de
Bolivia, se estaban realizando conversaciones para firmar un pacto de no
agresión en el Chaco.
La captura y destrucción del fortín Carlos A. López que la cancillería
boliviana seguía negando, la ocupación «en represalia» de tres fortines
paraguayos que se negaba a devolver y la actitud intransigente y belicista
del Gobierno boliviano, convencieron al Gobierno paraguayo de que la
solución militar era la única salida.
El presidente Eusebio Ayala decretó la movilización general para lanzar al
Paraguay a una guerra a gran escala. Durante el mes de agosto de 1932 se
concentraron 8000 soldados en la base de operaciones de Isla Poí; 1500 en
el fortín Nanawa y 3000 se ubicaron en el alto río Paraguay. Otros 3000
refuerzos fueron enviados a Isla Poí a fines de agosto.
Un mes después del ataque, el 15 de julio, las fuerzas paraguayas
desalojaron a los bolivianos del fortín Carlos A. López. En represalia el
presidente Salamanca ordenó la captura de tres fortines paraguayos:
Corrales, Toledo y Boquerón.
El coronel boliviano Enrique Peñaranda ocupó el 27 de julio el fortín
paraguayo Corrales, el día 28 el fortín Toledo, y el día 31 el teniente
coronel Luis Emilio Aguirre ocupó el fortín paraguayo Boquerón.
El día 7 de septiembre, el teniente coronel José Félix Estigarribia,
comandante de las fuerzas paraguayas, inició la marcha de aproximación
desde Isla Poí con un contingente de 5000 combatientes cuyo primer
objetivo era recuperar el fortín Boquerón.
El 9 de septiembre dos divisiones paraguayas, la 1.ª al mando del mayor
Carlos Fernández y la 2.ª al mando del teniente coronel Luis Ayala, con un
total de 5000 hombres atacaron a la 4.ª y 7.ª División bolivianas con un
total de 4000 hombres al mando del general Quintanilla dispersas en una
amplia zona que cubría los fortines Muñoz, Saavedra, Toledo, Arce,
Castillo, Yujra, Lara, Ramírez y Boquerón.
A las 05:30 de la mañana, la artillería paraguaya inició el ataque de
ablande sobre el fortín Boquerón provocando las primeras bajas bolivianas.
A las 07:00 comenzó el ataque paraguayo encabezado por el regimiento
"Curupayty", desalojado de Boquerón el 31 de julio, y que pidió el honor
de atacar primero. A los 100 metros de distancia el fuego sistemático y
preciso de las ametralladoras y fusilería boliviana detuvo el ataque.