Un kilo dejará de pesar un kilo: qué impacto tendrá en la vida cotidiana.
Por Irene Hartmann, publicado por Clarín.
A partir de 2019 se modificará la forma de medirlo. La opinión de un experto.
Hablando de sistemas de medición, la charla con el mayor referente en metrología de la región se produce a 11.053,83 kilómetros de distancia: París-Buenos Aires. Porque Héctor Laiz (gerente de Metrología, Calidad y Ambiente del INTI, presidente del Sistema Interamericano de Metrología y miembro del Comité Internacional de Pesas y Medidas) se prepara en territorio francés para darle una trascendental ajustada de tuerca a la noción que se tiene de un kilo, un mol, un ampere y un kelvin. ¿Lo curioso? Dicen que será un día histórico y que la ciencia gozará de una precisión inusitada hasta ahora. Pero a nosotros, los comunes, el cambio no nos moverá –valga la redundancia- el amperímetro.
Juego de pesas patrón. El juego de pesas son periódicamente auditado por el INTI. Foto de Jorge S. King ©Todos los derechos reservados |
Igual promete ser una pequeña revolución. Expertos en metrología de todo el mundo se reunirán en el Palacio de Versalles, el 16 de noviembre y, si todo sale como esperan (según Laiz, “es casi imposible que algún país vote en contra”), los 60 miembros plenos de la Conferencia General de Pesas y Medidas aprobarán la mayor revisión del Sistema Internacional de Unidades. Básicamente le harán un service al sistema de mediciones actual.
No es el primero. Esta conferencia se hace cada cuatro años y en varias oportunidades fueron ajustando conceptos y referentes de los sistemas de medición. Por ejemplo, explicó Laiz, “en 1983 se cambió el metro y desde entonces ya no se toma como referente una barra de platino e iridio sino que se define en función de la velocidad de la luz”.
En las antípodas de la industria 4.0, parece increíble que hasta el 16 noviembre todavía podremos decir que pesamos tomando como referencia un cilindro de platino e iridio guardado bajo mil llaves en el Bureau International des Poids et Mesures de Sèvres, cerca de París, Francia. En otras palabras, que hay un objeto concreto, uno solito en el mundo, cuya masa define mundialmente qué se entiende por kilo.
Pero esto cambiará; de allí lo revolucionario de esta reunión. “Será trascendente porque en un solo encuentro cambiarán cuatro unidades (kilogramo, ampere, kelvin y mol), de las siete de base (las anteriores más el metro, el segundo y la candela), con lo que a partir de ahora ya ninguna unidad va a estar definida en función de un artefacto. Todas estarán definidas en función de constantes de la naturaleza”, explicó Laiz.