Sobre el asalto a mi Madre

La semana pasada, tal como lo he comentado en éste espacio personal, la inseguridad nos tocó bien de cerca, la asaltaron a mi Madre. 

Fue en la puerta del supermercado de la otra esquina, y gracias a Dios no fue más que un susto y un verdadero dolor de cabeza, toda una situación que no se la deseo a nadie, y que seguramente la comprende bien aquellos que han pasado por lo mismo.

Durante éstos días mi Madre juntaba coraje para salir a la calle, una situación absolutamente injusta, y más aún para una buena persona con 82 años encima. Y en general toda la familia tenemos un malestar, esa incómoda pesadez que provoca la impotencia al comprobar que se está inseguro.

En éstos últimos días encaramos el tedioso trámite de gestionar las credenciales, como el carnet de la obra social y otros, que fueron sustraídos con la cartera. Hoy fuimos a la Seccional de la Policía, donde habíamos radicado la denuncia, y nos damos con la grata noticia que toda la documentación que fue robada con la cartera, había sido recuperada, evitándonos unos cuantos y tediosos trámites.

Cabe destacar el trato, considerado y respetuoso en todo momento del personal de la Seccional 2ª de la Policía, pero sobre todo es importante destacar la exitosa gestión de dar con el maleante y recuperar lo más importante de lo sustraído.

Gracias a Dios, el mal momento se va superando.