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| Foto: "Arbolada del jardín" @Todos los derechos reservados. |
La verdad que gracias a Dios hoy hizo un domingo hermoso, día tranquilo y luminoso hasta la tardecita. Después del almuerzo familiar, me puse a ventanear para ver que pasaba. Y las aves que venían a picotear las mandarinas del árbol bajo mi ventana hicieron que decidiera hace un pequeño safari fotográfico en el jardín, aunque algunas fotos la tomé desde la privilegiada posición de mi ventana favorita.
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| Foto: "Para el nido" @Todos los derechos reservados. |
Lo primero que me llamó la atención, fue la paloma (Columba livia) que construía su nido en el hueco de un aire acondicionado. Iba y venía con ramitas en el pico. Así es que configuré la máquina para disparos rápidos y entre todas las que tomé la que me gustó más es ésta.
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| Foto: "Comiendo mandarinas" @Todos los derechos reservados. |
Antes de bajar, al jardín, tomé esta donde están unos celestinos dándose una panzada de mandarinas. Son ejemplares del Celestino común (thraupis sayaca). Hermosas aves azules claro con la panza celeste clarito, muy bonitos los bichos.
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| Foto: "Quetubi en el flamboyan" @Todos los derechos reservados. |
Me paré un buen rato bajo el flambuyan, ya desojado. Esperé bien pegado al tronco del árbol, cosa de que las aves que se vienen a la planta de mandarina, que está al lado del flamboyan. El primero que llegó fue un hermoso quetubi (Pitangus sulphuratus).
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| Foto: "Celestinos descansando" @Todos los derechos reservados. |
Luego llegaron los celestinos, que se quedaron quietitos un rato, como descansando después de la panzada de mandarina que se mandaron. Hasta me permitieron arrimarme a tomar unas fotos.
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| Foto: "La vieja casa y el quetubi" @Todos los derechos reservados. |
Andaba un pájaro carpintero, pero muy arisco. El tipo hacía unos pasajes sobre la mandarina, pero al verme se iba. Cruzó hacia la arbolada del otro lado de la calle, en el patio de la vieja casa de nuestro buen vecino Don Juan. Me acomodé un rato en la verja y bajo una rama de la tipa blanca, esperando inútilmente que vuelva el carpintero.
En la espera llegó el quetubí que se puso a gritar desde un poste del alambrado de Don Juan.
La verdad es que se me está ocurriendo que por ahí podré armar un buen refugio camuflado ligero, de esos que se arman con una red de camuflaje por encima de un dispositivo tipo sombrilla, bien posicionado para verlos tranquilo y si que ellos se sientan amenazados. Vamos a ver que pasa, es una idea que hay que evaluarla.
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