Por John Schwartz, publicado por The New York Times.
El calentamiento global representa una gama tan amplia de riesgos para la humanidad, con tantos tipos de fenómenos implicados, que para finales de este siglo algunas partes del mundo podrían enfrentar hasta seis crisis relacionadas con el clima al mismo tiempo, según investigadores.
Esta perspectiva se describe en un artículo publicado el 19 de noviembre en la respetada revista académica Nature Climate Change, en el cual se muestran los efectos del cambio climático a lo largo y ancho de un extenso espectro de problemas, entre los que se incluyen las ondas de calor, los incendios forestales, el aumento del nivel del mar, los huracanes, las inundaciones, las sequías y la escasez de agua potable.
Búsqueda de restos humanos después de la tragedia del reciente incendio en Paradise, California Foto de Eric Thayer para The New York Times |
Estos problemas ya se presentan en una forma combinada, menciona el autor principal, Camilo Mora, de la Universidad de Hawái, campus Manoa. Mora hizo notar que hace poco tiempo Florida había experimentado una sequía extrema, récords de temperaturas altas e incendios forestales, además del huracán Michael, la poderosa tormenta categoría cuatro que azotó al estado el mes pasado. De forma similar, California está sufriendo los peores incendios forestales en la historia del estado, así como sequías, ondas extremas de calor y una pobre calidad del aire que amenaza la salud de los residentes.
La situación va a empeorar, sentenciaron los autores del artículo. El trabajo proyecta tendencias a futuro e indica que, para 2100, si la humanidad no toma cartas urgentes en el asunto para detener las emisiones de gases de efecto invernadero que fomentan el cambio climático, algunas áreas costeras tropicales del planeta, como la costa atlántica de Centro y Sudamérica, podrían enfrentar hasta seis crisis al mismo tiempo.
Esa posibilidad es “como una película de terror, pero real”, mencionó Mora.
Los autores incluyeron una lista de advertencias sobre la investigación: debido a que se trata de una revisión de artículos, se reflejan algunos de los sesgos potenciales científicos en esta área, entre los cuales se encuentra la posibilidad de que los científicos podrían haberse concentrado en los efectos negativos más que en los positivos; también hay un margen de incertidumbre respecto de la diferencia entre la huella del cambio climático y la variabilidad natural.
Para 2100, Nueva York podría esperar el golpe de cuatro crisis climáticas al mismo tiempo si las emisiones de carbono continúan al paso actual, según el estudio, pero si las emisiones se reducen de manera significativa esa cifra quizá se pueda reducir a uno. Las regiones en problemas de las costas tropicales podrían ver cómo se reduce de seis a tres el número de riesgos simultáneos.
El artículo explora las formas en que el cambio climático intensifica peligros, además de describir la naturaleza interconectada de estas crisis. Al calentar la atmósfera, las emisiones de gases de efecto invernadero pueden aumentar las sequías en lugares que son secos por naturaleza, “haciendo madurar condiciones para los incendios forestales y las ondas de calor”, aseguraron los investigadores. En zonas más húmedas, una atmósfera más caliente retiene un mayor grado de humedad y fortalece los aguaceros, mientras que el aumento en el nivel del mar dispara la cantidad de tormentas y una mayor temperatura en las aguas marinas puede contribuir a la destructividad general de las tormentas.