No es nuevo, lo vimos ya en varias ocasiones en la historia de las últimas cuatro o cinco décadas, y sobre todo de manera reiterada desde los sucesos desarrollados durante el duro enfrentamiento entre el campo y el gobierno en 2008.
Cuando no pocos se prepararon e invirtieron, y seguramente hasta se endeudaron para participar de la gran oportunidad que brindan los precios de las commodities y situación internacional, y que de golpe le retengan mucho más de lo que parece razonable.
Cuando no pocos se prepararon e invirtieron, y seguramente hasta se endeudaron para participar de la gran oportunidad que brindan los precios de las commodities y situación internacional, y que de golpe le retengan mucho más de lo que parece razonable.
Hoy con un panorama para nada claro con mucha incertidumbre, no me sorprende que las empresas piensen en tácticas que las llevan al exterior, como lo comenta la nota del Cronista:
Pymes planean abrir filiales en el exterior para conseguir dólares.- "Debido a la desaceleración económica, cada vez más empresas optan por expandirse fuera de las fronteras. Al exportar, obtienen cupos de importación". Por Mariano Gorodisch para el Cronista.com.
Lo que, como es sabido, no es tan fácil eso de abrir sucursales en otros países. Implica tener un socio local (destino elegido) y la obligación de innumerables trámites. Pero, las consecuencias de la situación económica en Argentina y tanta injerencia gubernamental está pesando de manera importante en la decisión de las empresas. Hay mucha desconfianza e incertidumbre.