El repliegue de la globalización afecta los precios de las acciones.
Por Riva Gold y Georgi Kantchev, publicado por The Wall Street Journal.
El comercio global crecerá este año a su menor ritmo desde 2007, según las previsiones de la Organización Mundial del Comercio.
LONDRES—Los principales ejecutivos de Barings se reúnen todos años en sus oficinas centrales de Londres para ultimar los detalles de sus proyecciones de inversión para los próximos diez años.
En la próxima, el gestor de fondos británico que administra US$275.000 millones considerará un nuevo descuento en lo que denomina “la prima de la globalización” en los precios de las acciones, o incluso su desaparición.
Una aceleración del comercio global y el flujo más libre del capital han impulsado los precios de la renta variable en Estados Unidos durante casi tres décadas, en parte al estimular el crecimiento económico y permitir que las empresas aprovechen el ingreso a nuevos mercados y las economías de escala, dicen los gestores de fondos.
Ahora, no obstante, la amplia desaceleración del comercio junto a la incertidumbre política provocada por acontecimientos como la salida del Reino Unido de la Unión Europea, un proceso conocido como brexit, o las elecciones presidenciales en Estados Unidos, han sembrado dudas entre los gestores de fondos de que un menor crecimiento de la globalización será el próximo gran lastre sobre las bolsas globales. “Creemos que probablemente la globalización ya alcanzó su apogeo”, dice Marino Valensise, director del equipo de activos múltiples de Barings. “No le va a gustar al mercado”, vaticinó.
El comercio global crecerá este año a su menor ritmo desde 2007, según las previsiones de la Organización Mundial del Comercio, lo que coincide con un aumento del proteccionismo y el estancamiento de las iniciativas para liberalizarlo. El Fondo Monetario Internacional acaba de advertir que las tendencias anticomercio como alzas de los aranceles pueden causar un daño de largo plazo a la economía mundial.
A algunos les preocupa que esto se traspase a los resultados empresariales.
El proveedor global de indicadores bursátiles MSCI estima que si hay un aumento importante de políticas como el proteccionismo comercial y el gasto fiscal deficitario en el mundo en desarrollo en los próximos dos años, las acciones estadounidenses bajarán más de 17%, mientras que la caída de las bolsas europeas se aproximará a 20%. En una prueba de resistencia realizada por MSCI, la empresa asume que tales medidas conducen a la estanflación, una combinación tóxica de inflación alta y crecimiento bajo.