Por Fernando Bertello, publicado por La Nación.
Con la nueva tecnología buscan complementar las tareas para evitar robos.
Ni las vacas ni los eventuales delincuentes lo van a ver volando muy alto. Una entidad ligada a productores agropecuarios de Tandil apunta a sumar un dron para tareas de seguridad rural.
Foto ilustrativa: UAV Vigía 2A (*) Imagen: Captura de pantalla del vídeo de la Fuerza Aérea Argentina La imagen no pertenece a la nota de La Nación |
Tandil fue pionera en la conformación de una patrulla rural que sirvió de experiencia para otras regiones. De hecho, hoy en la provincia hay Comandos de Prevención Rural (CPR), que funcionan en 100 municipios, más de 300 móviles y una superintendencia de delitos rurales.
Prevención
En el caso de Tandil, las tareas de prevención se hacen con siete camionetas (dos se sumaron recientemente tras un convenio con la Secretaría de Seguridad Ciudadana local, que permitió volcar recursos de una tasa de protección que también aporta el campo) que recorren cuatro áreas que dividen el partido. Este partido del sudeste bonaerense tiene 483.600 hectáreas y 2000 kilómetros entre caminos rurales y rutas provinciales. Allí el Comando de Prevención Rural cuenta con 37 efectivos. A las patrullas se las sigue por GPS, algo que permitió saltar desde la instrumentación de este control georreferenciado de un rastreo sobre caminos rurales de 12.000 kilómetros al año a 40.000 kilómetros mensuales, con todos los recorridos y litros de gasoil gastados. El municipio provee insumos clave.
"Años atrás el partido de Tandil perdía de 500 a 700 animales anuales, pero cuando se comenzó con el control por georreferenciamiento de patrullas los índices bajaron sensiblemente y hoy estamos en 40 o 50 animales anuales", dijo a LA NACION Emilio Bilbao, gerente de Funtala.