Esta mañana, durante un break que me tomé, que no fue con coffe, sino con mate bien caliente y amargo, saqué esta foto, desde adentro de la oficia de mi compañera de trabajo.
Que diferencia, afuera se veía todo iluminado por el sol, las plantas verdes llenas de vida, por ahí alguna mariposa o algún pajarito. Perro, que por ahí andaba haciendo de la suyas a lo dueño del Paseo. La vista daba gusto al igual que el aire mañanero y tranquilo.
Adentro, no estábamos mal, parece oscuro por el contraste nada más, la idea era resaltar lo de afuera. Nosotros, en el laburo, en general todos disfrutábamos el momento, el mate y la compañía. Algunos estaban cargando algunos datos y yo estaba de cebador por un rato.
Volviendo a la imagen, seguro que lo que más les impresiona son esas malditas pero necesarias rejas, a mi como algunos otros también. Es que, como todo el mundo lo sabe, los argentinos debimos auto encerrarnos por motivos de seguridad, mejor dicho por la inseguridad.
Que diferencia, afuera se veía todo iluminado por el sol, las plantas verdes llenas de vida, por ahí alguna mariposa o algún pajarito. Perro, que por ahí andaba haciendo de la suyas a lo dueño del Paseo. La vista daba gusto al igual que el aire mañanero y tranquilo.
Adentro, no estábamos mal, parece oscuro por el contraste nada más, la idea era resaltar lo de afuera. Nosotros, en el laburo, en general todos disfrutábamos el momento, el mate y la compañía. Algunos estaban cargando algunos datos y yo estaba de cebador por un rato.
Volviendo a la imagen, seguro que lo que más les impresiona son esas malditas pero necesarias rejas, a mi como algunos otros también. Es que, como todo el mundo lo sabe, los argentinos debimos auto encerrarnos por motivos de seguridad, mejor dicho por la inseguridad.