Por Daniel Pardo, publicado por BBC Mundo.
El presidente de Argentina, Mauricio Macri, está resultando mejor operador político que gestor de la economía.
Dos veces alcalde de la ciudad de Buenos Aires, el ingeniero de 59 años empezó su carrera política en el seno del poder: el fútbol, desde la presidencia de Boca Juniors.
El Director del Departamento del Hemisferio Occidental, Alejandro Werner y el Ministro de Hacienda argentino Nicolas Dujovne en la sede del FMI en Washington, DC. 9 de mayo de 2018. © Foto del FMI, vista en Flickr |
Pero esta semana, la continuidad del proyecto político que creó Macri se puso en riesgo por lo que muchos pensaban que iba a ser su punto fuerte: el manejo de la economía.
El anuncio de que Argentina negocia el auxilio financiero del Fondo Monetario Internacional (FMI) confirmó lo que los mercados venían percibiendo hace meses: que el plan económico de Macri es menos exitoso de lo que se creía.
Hasta esta semana, Macri contaba con un sólido apoyo del 40% de los argentinos, según varias encuestas. Se le consideraba favorito para ser reelegido en octubre de 2019. Él habla de importantes logros, como bajar levemente la pobreza, volver al crecimiento y detener la corrupción.
Pero al haber acudido al FMI, que tiene 75% de rechazo debido a un historial de fracasos, es probable que muchos se desencanten con este gobierno de tecnócratas graduados de Harvard y Oxford.
Varios expertos de distintas tendencias coinciden en cuáles son los cuatro errores de lo que en su momento Macri catalogó como "el mejor equipo económico en 50 años".
1. No controlar la corrida cambiaria
La ida al FMI fue anunciada después de que el peso argentino se devaluara un 15% en dos semanas.
Aunque el gobierno atribuyó el desplome a la coyuntura internacional y es cierto que diversas monedas latinoamericanas han perdido valor respecto al fortalecido dólar, ninguna otra cayó tanto debido a los capitales que atrae Estados Unidos.
El Banco Central intentó mitigar el desplome del peso sacando US$5.000 millones de sus reservas en una semana para abastecer el mercado de dólares y subió la tasa de interés a 40% para promover el ahorro en pesos.
Pero, según varios economistas, las medidas —que contaban con un amplio monto de casi US$70.000 millones de reservas internacionales— hubieran podido ser implementadas desde diciembre, cuando empezó el desplazamiento de capitales hacia EE.UU..
Algunos expertos dicen que, más que la coyuntura internacional, la situación actual se debe a un error concreto: haber establecido un impuesto a la renta financiera hace dos semanas.
Aunque era un pedido de parte de la oposición, que denunciaba una "fiesta financiera", el impuesto fue un baldazo de agua fría para el que no estaban dadas las condiciones.
2. Volver al mundo en tiempos de proteccionismo.
Macri dice que heredó de Cristina Fernández de Kirchner un país con grandes desfalcos que a largo plazo estaban destinados a generar más inflación, déficit y recesión.
Su estrategia para solucionar esto fue lo que él llama "volver al mundo".
La expresidenta tuvo grandes peleas con el mundo financiero hasta el punto de que Argentina dejó de recibir financiación de los mercados.
Macri saldó las deudas con Wall Street y empezó a emitir deuda.
Pero además se adhirió a campañas internacionales en materia de lucha contra el terrorismo y el narcotráfico; se reunió con todos los presidentes de Occidente y ha hecho gala del evento del G20 que hospedará en noviembre.
El problema de volver al mundo, afirmaron varios internacionalistas en su momento, es que el mundo ha cambiado: Estados Unidos eligió un presidente proteccionista y la Unión Europea está ocupada negociando los términos del Brexit.