Sídney (Australia), 13 mar (EFE).- El primer ministro australiano, Tony Abbott, anunció hoy que Australia comprará aviones no tripulados MQ-4C Triton de vigilancia marítima, con el fin de proteger los recursos y las fronteras del país.
Abbott indicó que el Gobierno decidirá el número de aviones y el momento de la adquisición en 2016, después de que se publique el Libro Blanco de Defensa el próximo año, aunque no aportó detalles sobre los costes de la operación, según la agencia local AAP.
Australia además espera que la Marina estadounidense, que comenzará a operar los Tritons en 2015, complete con éxito este programa de desarrollo militar.
"Estos aviones patrullarán los vastos océanos australianos y trabajará de forma cercana con otros bienes de las Fuerzas de Defensa de Australia para asegurar nuestros recursos oceánicos, que incluyen nuestros recursos frente a las costas del norte australiano, y a ayudar a proteger nuestras fronteras", dijo Abbott.
El primer ministro, quien realiza un viaje de dos días en el estado de Australia del Sur en la antesala de las elecciones en esa jurisdicción, anunció que dichos aviones operarán en la base aérea Edinburgh, a las afueras de la ciudad de Adelaide.
Para ello el Gobierno australiano gastará unos 126 millones de dólares (91 millones de euros) en unas instalaciones para los nuevos Triton, de los cuales la mayor parte se destinará a la base de Edinburgh, donde operan la flota de AP-3C Orion y los nuevos P-8A Poseidons.
Abbott también anunció que se dará más de 70 millones de dólares (50 millones de euros) para la empresa de defensa BAE Systems en Adelaida como parte del contrato para apoyar a los aviones Wedgetail de la fuerza aérea australiana.
El anterior Gobierno ya había expresado en el Libro Blanco de Defensa 2013 sus intenciones de reemplazar su flota de AP-3C con aviones P-8A Poseidon, y reforzarla con "drones" capaces de vigilar una amplia área marítima.
El Gobierno australiano pidió a EE.UU. información sobre los MQ-4C Triton, desarrollados por Northrop Grumman para la Marina de los EE.UU. y descendiente de los aviones Global Hawkno, que no supone un compromiso de compra.
El Gobierno estuvo interesado en adquirir aviones no tripulados desde finales de 1990, cuando se unió al proyecto de investigación de los Global Hawk, y en 2006, el entonces gobierno conservador dio su aprobación en principio para la adquisición, pero tres años más tarde, la administración laborista dio marcha atrás, recordó la agencia local AAP. EFE